26 de julio de 2015

Mini-Reseña: "STRADA ROMANA"






Autor: Walter Obert
Jugadores: 2 - 5
Duración: 45 min.


Hoy le toca reseña a un juego bastante desconocido sobre el que reparé porque estaba tirado de precio cuando la liquidación de laPCra, y que me decidí a comprar porque su aspecto me entró por el ojo.

Mecánica.

Se supone que somos mercaderes de la Roma clásica moviendo carros y mercancías entre el centro de la ciudad y el puerto de Ostia, con lo que conseguiremos PV para ganar el juego. Para ello dispondremos de 3 puntos de acción cada turno con los que mover carros, que son independientes y pueden ser movidos por igual por todos los jugadores y que tienen un sentido de circulación determinado e invariable (unos van hacía el puerto y otros hacía la ciudad).

A lo largo del recorrido, y en función del lugar donde acabe su movimiento cada carro que movamos, se podrán ir recogiendo mercancías y contratos de varios tipos (cubos y losetas de madera en 6 colores) que correctamente emparejados nos darán los PV al final. Al recoger contratos, además, recibiremos monedas para cambiar por PV o con las que comprar movimientos especiales para los carros (saltar, puntos de acción extra, etc.). Si no quieres mover carros, o no puedes (a veces se forman atascos que impiden el movimiento salvo comprando movimientos especiales), también puedes gastar tu turno apostando por los carros que llegarán antes a destino, o pasar para conseguir algunas monedas. Cuando 4 carros alcancen su meta acaba la partida.


Conclusión.

STRADA ROMANA es un juego sencillo y abstracto (y por tanto con un azar mínimo) lo suficientemente ameno como para echar un rato agradable con la familia o con los amigos. Pero nada más. Porque a pesar de partir de un planteamiento interesante, al final el conjunto resulta excesivamente insustancial.

La mecánica principal del juego, mover carros intentando emparejar las mercancías y los contratos que te convengan (los PV se obtienen multiplicando el número de tipos distintos de contratos completados por la cantidad del tipo más numeroso que tengas), es entretenida pero no permite planificar prácticamente nada hasta el mismo momento de iniciar tu turno porque la situación del juego puede variar sustancialmente de un jugador a otro, con lo que el entreturno puede resultar pesado, se desvanece la interacción competitiva entre jugadores y se pierde la tensión del juego: no tiene sentido preparar jugadas porque te las van a pisar con casi total seguridad. Y aunque la mecánica de apuestas con los carros aporta algo más de emoción, acaba siendo insuficiente.

Y bueno, rejugable por abstracto y con componentes vistosos y de calidad, en mi opinión el juego es para 4 ó 5 jugadores (aunque con 4 se ganará en fluidez), porque las reglas para 2 ó 3 indican que sólo se puede coger o una mercancía o un contrato por turno y con ello desaparece el aliciente de conseguir combos de fichas ajustando los movimientos y, para mi, esto ya es un menoscabo definitivo (quizá subsanable con alguna regla casera).

Complejidad: 1/5
VALORACIÓN: 1/5


2 comentarios :

  1. Algún día si estamos muy aburridos, me gustaría probarlo a 4, porque a tres no me gustó es verdad que solo poder coger una cosa, te deja una sensación de que le falta algo al juego.

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